Stavkirkes, las Iglesias del Dragón

11.10.2022 16:52

   En Dinamarca y Suecia, como en otras regiones del norte de Europa, las viejas iglesias fueron progresivamente sustituidas por construcciones de piedra, sin embargo, la tradición de construirlas de madera perduró en Noruega y revivió admirablemente en el siglo XII. Se caracterizan por las líneas de sus tejados que no dejan de evocar, de un modo u otro, a las pagodas orientales y a las figuras de dragones que sobresalen en las esquinas.

   Solamente en Noruega se debieron construir entre uno y dos millares de iglesias de madera, la gran mayoría entre los siglos XII y XIV, hasta la llegada de la Peste Negra en el año 1349. De ellas tan solo quedan en pie veintiocho, las llaman stavkirke. Stav hace referencia a los gruesos postes de madera que las sostienen, kirke no significa otra cosa que iglesia. Generalmente sus plantas están compuestas por una nave y un coro, y, en ocasiones un deambulatorio o una galería perimetral. El aspecto oriental lo proporcionan los tejados escalonados y los salientes decorativos. En los interiores, las iconografías se sitúan en portales, baldaquines y frontales y recuerdan elementos célticos y del románico y es corriente la presencia de dragones y leones en las tallas de madera. Entre los años 1650 y 1850, en solo dos siglos, el número de templos que quedaba en pie pasó de 270 a 60. La limitada capacidad de aforo y la introducción de la Reforma facilitaron la demolición de muchas de ellas. Otras han escapado del olvido absoluto gracias a litografías, dibujos y a las fotografías que ya se tomaron a partir del siglo XIX. Otro factor decisivo en la conservación de las que quedan han sido los esfuerzos de la Society for the Preservation of Norwegian Antiquites, actualmente la Society for the Preservation of Norwegian Ancient Monuments.

   A lo largo de la interminable ruta E6, que lleva desde Oslo hasta Trondheim, se encuentran, la iglesia de Ringebu y la de Kvikne. Antes de llegar a Ringebu, una población de casi 4.500 habitantes en la provincia de Oppland, allí donde las aguas del Guddbrandsdalslågen se dividen a ambos lados de la isla de Oldstadøya, se encuentra junto a las lápidas de piedra del cementerio, la stavkirke, construida aproximadamente en 1220. La planta tiene forma de cruz griega. En 1631, tras la Reforma Luterana, fue ampliada por el constructor Werner Olsen y se le añadió el campanario, rojizo, que arranca del centro del crucero. El transepto da a un vestíbulo que lleva a la entrada. El portal, decorado con figuras de dragones, pertenece a la iglesia original y posee unos destacables retablos. Los dos pisos de inclinados tejados rodean la torre central coronada por una aguda espira de color rojo que contrasta con el color marrón claro de la madera, que predomina, pero que conjuga, con los ventanales de la primera planta. En los muros todavía se pueden apreciar un par de inscripciones rúnicas y dibujos de animales. En unas excavaciones recientes, en la década de 1980, se descubrieron los restos de un templo anterior, de mediados del siglo XI, con trazas de postes clavados en la tierra, a diferencia de las estructuras características de las stavkirke, que se cimientan sobre piedra, para evitar la putrefacción prematura de los pilares de madera. Durante aquellas excavaciones se descubrió un tesoro de monedas medievales bajo el suelo del templo, 892 piezas de los tiempos del rey Haakon Haakonsson, algunas de procedencia alemana y sueca. La stavkirke sigue siendo hoy en día la iglesia principal de la población de Ringebu.

   Abandonando la E6, atajando por las montañas de Østerdalen y Trøndelag en la provincia de Hedmark, la iglesia de la dispersa aldea de Kvikne se alza entre el río Orkla y la carretera. Destaca la estilizada y larga espira rodeada por la estructura, en este caso sencilla, del templo.

   Entre Trondheim y Ålesund, casi tocando a las frías aguas del Rødvenfjord, conectado al Midfjorden antes de llegar al mar, está la pequeña iglesia de Rødven. Fue remodelada en el siglo XVII, cuando se derribaron el antiguo coro y el corredor exterior, añadiéndole un vestíbulo que da a poniente. Del cuerpo central sobresale el campanario, rematado con una aguja hexagonal. Los muros están apuntalados. Cruzando la carretera se encuentra la iglesia nueva, de 1907, de un vistoso y característico color rojo oscuro.

   A menos de un centenar de quilómetros al sur de Bergen, Sognefjorden, el fiordo de Sogn, es el mayor de Noruega y, en el mundo, solo es superado por el de Scoresby Sound, en Groenlandia. Se adentra poco más de doscientos quilómetros hacia el interior del país, llega hasta la población de Skjolden, en el fondo del Lustrafjord, la puerta de entrada del parque natural de Jotunheimen, el reino de los gigantes en la mitología nórdica. El nombre del fiordo, Sogn, significa algo así como aspirar, y hace referencia a las fuertes corrientes que hay en la entrada, producidas por la gran diferencia de nivel del fondo marino. Allí, en la boca se encuentra a un centenar de metros bajo el nivel del mar, hacia el interior, el fiordo alcanza profundidades que superan el millar de metros. A lo largo del Sognefjorden, las cimas de las montañas se reflejan sobre la especular superficie de las aguas y también asoman cuatro de las más célebres iglesias de madera: las de Kaupanger, la de Urnes, la de Borgund, más escondida en el fondo del valle de Lærdal y la de Hopperstad, en Røysane.

   La de Kaupanger se encuentra junto a una pequeña bahía situada casi al fondo del fiordo. Desde el exterior se aprecian tres niveles de distintas amplitudes. El tejado de la planta baja cubre el deambulatorio, mientras el superior protege el resto de la nave central, de donde sobresale el campanario. A poniente un porche resguarda la entrada. La última restauración realizada, la de 1960, eliminó el encalado, dejando de nuevo a la vista las paredes de madera. La iglesia de Kaupanger ha estado continuamente en uso y todavía es la iglesia parroquial de la localidad.

   Cruzando hacia la otra orilla del Lustrafjord se encuentra la de Urnes, con una estructura similar, aunque quizás un poco más estilizada. Es la más antigua de las stavkirke, conserva bastantes elementos medievales: vigas, alfeizares, postes y placas del muro del pasillo. Posee decoraciones interesantes: en un capitel hay tallada una figura que parece un centauro, armado con una espada y un escudo; en la parte baja de la portada un león muerde a una serpiente, ilustrando la lucha entre el bien y el mal; y los complicados e irregulares elementos tallados en una pared recuerdan las raíces de un árbol, quizás Ýggdrasil, que contenía todo el mundo mitológico escandinavo.

   En la orilla meridional del Sognefjorden, en el valle de Lærdal, se encuentra la de Borgund, considerada como la mejor conservada de todas ellas y una de las más emblemáticas y, por tanto, una de las más visitadas. Y no es para menos, su monumental estructura se alza en un escalonamiento de seis tejados superpuestos que se corona en el campanario. Hay un tejado para la sala central, otro para el deambulatorio, otro para la galería y los tres restantes en la torre, que va reduciendo progresivamente su anchura, todos ellos con tejas de madera de pino. Las esquinas de los tejados superiores están decoradas con cabezas de dragones que sobresalen prominentemente y son las que le dan, con su curvilínea estructura, un cierto aire de pagoda oriental. El ornamento de piedra en la puerta occidental es románico, decorado con motivos vegetales y escenas de luchas de dragones. Sobre el ábside hay otra torre, esta de pequeñas dimensiones. La iglesia fue desconsagrada en 1868, cuando se construyó la nueva iglesia, y en 1877 fue comprada por la Sociedad para la Preservación de los Monumentos Antiguos para abrirla al público. Recientemente se ha habilitado un centro de visitantes para mostrar la historia y las técnicas constructivas de las iglesias de madera noruegas.

El camino que lleva a Vik y a Røysane, a orillas del mismo fiordo, es una ruta espectacular de unos cincuenta quilómetros. Empieza en el desvío de Vossevangen, recorre un par de pequeños lagos mientras se adentra en el estrecho valle de Myrkdalen que se cierra en unas interminables cascadas y con la carretera ascendiendo en zigzag para llevar a las cimas de Vikafjell, donde la nieve perdura en el verano noruego. Cuando la nieve se transforma en niebla empieza el descenso hacia el curso del fiordo y, atravesadas las nubes, aparecen las casas multicolores y las espiras de las iglesias. Allí está la de Hopperstad, que mantuvo su forma original hasta el siglo XVII, cuando se prolongó la nave y se alzó el campanario, en las reformas efectuadas en el siglo XX se intentó recuperar la antigua apariencia, imitando, en parte, la forma de escalonamiento de la iglesia de Borgund, incluyendo los ornamentos con figura de dragón. En los portales, la decoración está elaborada con más dragones, estos mordiéndose unos a otros. El templo fue adquirido en 1880 por la Society for the Preservation of Ancient Monuments y fue restaurado por el arquitecto Peter Andreas Blix entre 1885 y 1891. Blix fue el principal artífice de la conservación del templo, ya que este estuvo a punto de ser demolido en 1877, cuando fue construida la nueva iglesia de Vik. Blix adquirió el viejo templo y lo restauró a sus expensas. En el interior el baldaquín está decorada con cuatro rostros claramente románicos y ocho pinturas con escenas bíblicas.

   Aún más al sur, en la ruta que lleva de Bergen a la capital noruega, Oslo, se pueden visitar otras tres notables stavkirke. Son las de Uvdal, Rolleg y Heddal, de hecho, más próximas a Oslo que a Bergen. La primera, la de Uvdal, de un aspecto más sencillo que otras, tiene, sin embargo, una extraordinaria decoración en el interior, con las paredes, paneles de separación de los asientos el pilar central y el techo, pintados con motivos vegetales; en uno de los portales figura la leyenda de Gunnar en el foso de las serpientes, tocando el arpa con los pies, perteneciente al ciclo de los Volsungos. Actualmente está desconsagrada y abierta al público.

   Siguiendo por la misma carretera, más o menos paralela al río Numedalslågen, se encuentra Rollag, rodeada de bosques. Su iglesia es sencilla, con una nave rectangular y un coro sin ábside. A finales del siglo XVII, al añadirse un transepto, se transformó la planta en una de cruz griega.  La de Heddal, cerca de Notodden y su lago, en la región de Telemark, es la más espectacular por sus dimensiones, veinticinco metros de longitud y veintinueve de altura, tiene tres campanarios, dos de ellos circulares y, el más alto, cuadrado. Da la sensación de que son múltiples construcciones pegadas una junto a otra. Sobre los sesenta y cinco tejados, muy compactos, hay cruces y cabezas de dragones que sobresalen de las uniones de las aguas. La iglesia tiene cuatro entradas con sus puertas talladas y una inscripción rúnica en el deambulatorio exterior. Durante la Edad Media las mujeres entraban a través de la puerta septentrional, los hombres por la opuesta y los sacerdotes por la del coro. El portal occidental se empleaba cuando se celebraba un bautizo; este estaba decorado con figuras de serpientes y dragones para asustar a los demonios, para asustar al mal con el mal, ya que existía la creencia de que el diablo tenía poder sobre los no bautizados. Sobre la columna de la izquierda un grotesco león que representa al león de Judá simboliza la victoria de Cristo sobre el mal; mientras, en la columna de la derecha, dos osos se pelean entre ellos. En el interior conserva tres muebles medievales: la silla del obispo, un banco y un atril, todos decorados con motivos relativos al mito de Sigurd, Brynhild y Fafnir, el dragón. Al levantar la vista, la oscuridad aun permite apreciar los veintitrés rostros sonrientes que se asoman al coro y a la nave.

   En el mismo Oslo, en el recinto del Museo del Pueblo Noruego, en la isla de Bygdøy, se encuentra la stavkirke de Gol, que fue trasladada desde esa pequeña población de la provincia de Buskerud, a 192 quilómetros de la capital. Fue desmontada en 1884 y, cuando se reconstruyó se hizo tratando de mantener el aspecto original.

© J.L.Nicolas

 

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